(CNN Español) — ¿Te imaginas poder alucinar de por vida a todos los mundiales de fútbol de la FIFA y con todos los gastos pagados? Pues no se tráfico solo de una idea o un sueño para muchos aficionados al rey de los deportes, sino que desde 1998 es la efectividad para una afortunada mujer.
Es el caso de María del Jesús Pinargote, una ecuatoriana de 65 primaveras que nació en la parroquia de Canuto en la provincia costera de Manabí. Ella ha podido alucinar desde 1998 a siete mundiales de fútbol consecutivos gracias a un premio otorgado “de por vida” para asistir a la Copa del Mundo cada cuatro primaveras con un concomitante.
Es una fortuna que seguro muchos fanáticos del fútbol desearían disfrutar cada cuatro primaveras para ver a sus equipos favoritos disputando el título mundial en primera fila.
¿Cómo logró María del Jesús obtener este premio?
Hace más de 24 primaveras María del Jesús Pinargote no se imaginaba que ganaría un premio que le permitiría disfrutar de por vida de la fiesta más importante del fútbol mundial cada cuatro primaveras. La tapa de una botella de Coca-Cola y un cupón depositado en un ánfora con sus datos fue todo lo que necesitó para participar y triunfar.
Copa del Mundo Japón 2002 cuando Ecuador clasificó por primera vez a un mundial.
“Se compraba la cola de vidrio, la tapita venía y nos daban un vaso, uno canjeaba el vaso y ahí daban un cupón; yo llené seis cupones porque coleccioné los seis vasos con diferentes diseños y deposité en el ánfora”. Así describe Pinargote a CNN aquel momento que le dio la suerte.
Recuerda que el 14 de junio de 1998 fue el día que recibió una citación de una persona que le informó que había rebaño. Su primera reacción fue de incredulidad y tuvo que pedir a su consorte que indagara más sobre los datos que le proporcionaron.
“Me dijeron que había salido favorecida con el premio de viaje de por vida a los mundiales; yo no creía. Después mandé a mi esposo para que investigara bien cómo era y me dijo: ‘sabes que te ganaste el viaje a los mundiales de por vida’, y él feliz, yo también; saltábamos de alegría y todo”, dijo Pinargote a CNN.
Una vez que su consorte confirmó que efectivamente María del Jesús ganó el premio, dice que su grupo festejó y empezaron los preparativos para alucinar a su primer mundial. “Fue una experiencia muy linda. Estábamos felices todos; pasamos muy bonito. Fue una experiencia inolvidable”, precisa Pinargote.
El trayecto por siete mundiales consecutivos
María del Jesús Pinargote confiesa que no había viajado fuera de Ecuador ni se había subido a un avión en su vida hasta que llegó el año 1998 y viajó a su primer mundial en Francia y luego, de forma consecutiva, ha ido a los mundiales en Japón, Alemania, Sudáfrica, Brasil, Rusia, y hace pocos días estuvo en Qatar apoyando a la selección de Ecuador en su cuarta billete en una Copa del Mundo de la FIFA. Una posibilidad que muy pocos pueden conseguir.
“Hay más emoción cuando clasifica la selección, pero igual es lindo estar en un estadio. Es lindo ver la bandera en otro país, nuestra bandera ecuatoriana”, enfatiza.
A cada alucinación Pinargote puede padecer a un afortunado concomitante. A tres mundiales viajó con su consorte quien falleció hace pocos primaveras, a dos mundiales se fue con una prima, y a otros dos con su cuñada Mercedes Pinargote.
María adjunto a su consorte. La Copa del Mundo Brasil 2014 fue el postrero mundial al que pudo alucinar con él.
Mercedes muestra a CNN un disco de fotos con varios expresiones del mundial de 2002 cuando “Jesusita”, como le dice de cariño, la invitó a comportarse una aventura mundialista que asegura rememorar con nostalgia, cariño y emoción. Además, era la primera vez que Ecuador clasificaba a un mundial de fútbol por lo que los sentimientos se multiplicaron, asegura.
“La gente de otros países nos apoyaba; uno se siente feliz, contento, emocionado. La experiencia de estos dos mundiales que gracias a mi cuñada me ha podido llevar, ha sido hermoso, lindo. Estoy muy agradecida con Dios y con ella por esta oportunidad”, comenta Mercedes con los luceros llorosos.
Dos personas son las únicas ganadoras de este premio en la Latinoamérica
La multinacional Coca-Cola en Ecuador indicó a CNN que María del Jesús Pinargote y otra persona más en Perú fueron los dos únicos ganadores en toda Latinoamérica en 1998 del premio para alucinar de por vida a los mundiales con todo pagado y con un concomitante. Un premio otorgado al azar que ha permitido a esta ecuatoriana comportarse en siete ocasiones la pasión del fútbol en diferentes destinos y llevando la bandera de Ecuador con mucho orgullo.
¿Quién será el próximo concomitante de María del Jesús?
Para María del Jesús Pinargote, cada alucinación mundialista ha sido una forma de descubrir otras culturas y avances tecnológicos en los escenarios deportivos. Espera que Ecuador nuevamente clasifique en 2026 y que la selección juegue en México, un país que asegura quiere conocer por su civilización. Su cuñada Mercedes cuenta que Pinargote no suele revelar el nombre de su concomitante fácilmente y que varios de sus sobrinos le han pedido que los lleve.
Copa del Mundo Japón 2002 cuando Ecuador se enfrentó a México en la período de grupos.
“Ella siempre se lo tiene calladito; ella no dice nada; nos tiene en suspenso, hasta cuando dice ‘me voy contigo’”. Sus familiares tendrán que esperar los próximos primaveras para asimilar quién viajará con ella al mundial de 2026.
Adicional a las vivencias de alucinar a todos los mundiales desde 1998, María del Jesús trae expresiones de cada país para regalar y para conservarlos de forma personal. Una forma de padecer un poquito de cada mundial para la posteridad.
De Qatar dice que volvió admirada de la ordenamiento del mundial y que, aunque la selección de fútbol de Ecuador no pudo clasificar a octavos de final, considera que hizo un gran papel y que contó con el apoyo de muchos ecuatorianos.
Pinargote asegura que en este mundial pudo ver más ecuatorianos de lo habitual en las calles de un país sede de la Copa del Mundo y considera que padecer la bandera ecuatoriana fue un cierto orgullo y una experiencia que seguirá sumando a su vida.